martes, 13 de marzo de 2012

LA BELLEZA DE LA FE

Otro regalo para la Cuaresma, sobre todo para preparar la contemplación de la cruz, en el via crucis, o el Viernes Santo. Es una reflexión de Benedicto XVI, cuando todavía era cardenal, sobre la belleza de la cruz. El artículo completo lo podéis encontrar en el libro Caminos de Jesucristo ed. Cristiandad, Madrid, 2005, pp 33-41 y se titula "Herido por la flecha de la belleza".






Quien cree en Dios, en el Dios que se ha revelado precisamente en la apariencia desfigurada del Crucificado por "amar hasta el extremo" (Jn, 13, 1), sabe que la belleza es la verdad y que la verdad es la belleza, pero en el Cristo sufriente también aprende que la belleza de la verdad contiene la ofensa, el dolor e incluso el oscuro misterio de la muerte, y que esto solo puede ser encontrado cuando se acepta el sufrimiento, no cuando se ignora.[...] 

Ser subyugado por la belleza de Cristo es un conocimiento más real y más profundo que una mera deducción racional. [...] Tenemos que descubrir esta forma de conocimiento, puesto que ello constituye una exigencia apremiante de esta hora.

1 comentario:

  1. Hace poco tiempo vi La Pasión de Mel Gibson por primera vez (o al menos vi el principio) y tras tantos avisos no puedo decir que me impresionara al ver tanta sangre y sufimiento (tal vez tanta violencia en televisión me haya vuelto algo insensible), pero sí que me sorprendieron algunas cosas, como el empeño d elos soldados romanos en torturar y castigar a Cristo, los escupitajos, los insultos, los empujones,... Era muy distinto a la imagen que yo tenía en mente, pero posiblemente fuese más real.

    Porque negar todos los agravios que sufrió Jesús en su Pasión, aunque sólo sea intentar ocultar un insulto, un golpe, una humillación de los que recibió para intentar hacer que la historia se "trague" mejor, sin tanta violencia, para que quede más bonita es como negar la cruz. Si Cristo no sufrió, ¿qué mérito tuvo salvarnos de nuestros pecados? ¿Para qué descendió a la Tierra, pudiendo haber hablado a los profetas desde el Cielo?

    Pero Cristo bajó a la tierra, y todos sus sufrimientos forman parte de la belleza de su acto de redención. Cristo es la Verdad y el Camino a la Verdad, y lo demostró de la forma más bella posible: dando su vida por nosotros.

    De igual manera, vivimos en un mundo lleno de dolor y miseria, azotado por el hambre y la enfermedad. La pobreza y la marginalidad conviven con nosotros en nuestra misma ciudad, en nuestro mismo barrio, pero a veces preferimos no verlas, porque bastante mal está el mundo como para que encima nos lo recuerden cada día. Pero la solución para un mundo más bello no es ocultar la verdad, sino todo lo contrario. Hemos de salir fuera, quitarnos la venda, abrir los ojos y ver en cada situación de sufrimiento una oportunidad de actuar como Cristo. Y así, contemplando la Verdad, alcanzaremos la Belleza.

    ResponderEliminar